..hoy somos todos pumas..
Estribillo
Sean eternos los laureles,
que supimos conseguir.
Coronados de gloria vivamos...
¡o juremos con gloria morir!
En estos días cuando la justicia nos guiña el ojo, día de felicidad por cierto. Cuando la lluvia gusta y por algún tiempo sentimos que aunque sea cada tanto los tiranos pagan. Días en los que no suena tan estupido escuchar a alguien cantando "si un traidor puede más que unos tantos… que esos tantos no lo olviden fácilmente..."
Llenemos nuestro corazón de esperanza y duda ¡Algo por salvar nos queda! ¡No todo es mierda! Pero cuidado amigo, que ya salimos a la calle varias veces a festejar… Un mundial...Una guerra… Que esta bandera sea la tuya, la mía; la de la autocrítica y de nadie más.
Porque estos días nos pertenecen, con la responsabilidad que acarrean ¡Nada de instituciones, gobiernos y poderes! ¡Nuestros! Momentos para mirarnos, buscarnos, cuestionarnos y encontrarnos, por más que muchas veces no nos guste.
Por eso, con la lluvia en la cara sonriamos a este logro, pero con cautela. Y entonces si, que sean eternos los laureles… quizás algo supiste conseguir…
Te repito, que esta bandera sea la tuya, la mía, la de la autocrítica y la de nadie más.
En “Historias de la Argentina Deseada” Tomás Abraham hablaba de microfascismo.
Yo hoy quería hablar de microvonwernich
//malaprendidos//
Llenemos nuestro corazón de esperanza y duda ¡Algo por salvar nos queda! ¡No todo es mierda! Pero cuidado amigo, que ya salimos a la calle varias veces a festejar… Un mundial...Una guerra… Que esta bandera sea la tuya, la mía; la de la autocrítica y de nadie más.
Porque estos días nos pertenecen, con la responsabilidad que acarrean ¡Nada de instituciones, gobiernos y poderes! ¡Nuestros! Momentos para mirarnos, buscarnos, cuestionarnos y encontrarnos, por más que muchas veces no nos guste.
Por eso, con la lluvia en la cara sonriamos a este logro, pero con cautela. Y entonces si, que sean eternos los laureles… quizás algo supiste conseguir…
Te repito, que esta bandera sea la tuya, la mía, la de la autocrítica y la de nadie más.
En “Historias de la Argentina Deseada” Tomás Abraham hablaba de microfascismo.
Yo hoy quería hablar de microvonwernich
//malaprendidos//
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